
Reconozco que perseguí sus tracks después de leer un comentario en redes sociales, de alguien en quien confío (musicalmente). Borges presumía de lo leído, no de lo escrito y creo que esta es la clave de todo creador: sus fuentes. Hablamos de una agrupación de productores, músicos y emeces que comparten pasión por el jazz y sus disciplinas afines. Y se nota. Se agradece que escojan un camino que precisamente no les reportará brillo a sus egos, apropiado para estos momentos de directo y cercanía. Samplers, instrumentos, voces y efectos para brindar sus historias desde la oscuridad más realista a los tintes brillantes y delicados. Blowing’ Up Treez tiene estilo y futuro, elementos necesarios para sostener el sueño y jugar sin prejuicios al juego del jazz. Para oídos inquietos y mentes abiertas. Descubre a Blowing’ Up Treez, el juego del jazz. ¡Que siga el juego, chicos!
César Cid
@blowinuptreez