Auténticos alquimistas del sonido, Tremendo y Griffi reivindican la autenticidad del género con un documental conmemorativo de Vidalogía, disco monumental que cumple 20 años.
Hacía tiempo que no disfrutaba tanto con una historia vinculada a la música urbana, especialmente por sus protagonistas. “Relojeros” es el nombre de documental que el mc Tremendo (menda) ha realizado en torno a su primer disco “Vidalogía”, homónimo del tema incluido en el disco. La historia cuenta el proceso de creación del disco, con la presencia necesaria del gran Griffi, el alquimista paciente de la factoría Delpalo, que has conocido (sí o sí) como el cincuenta por ciento de Solo Los Solo, con Juan Solo. Un recorrido fundamental para conocer el devenir de la música urbana, especialmente en Cataluña.
Si algo me proporcionado chispazo es escuchar a Frank T una frase que, iniciada la década de los dos mil, me dijo unas cuantas veces: “nadie ha hecho nunca lo que está produciendo Griffi”. Esa crema tiene que ver con las producciones del de Tarrasa, suave y directo, a lo largo de toda su actividad musical. Si “Quimera” es uno de los discos referenciales del rap en español y el sonido Strictly Jabugo, un sello indeleble, “Vidalogía” nos trajo una propuesta que nadie esperaba, a partir de un artista distinto en todo: actitud, color de su voz, golpe tonal ascendente en los finales y una personalidad normalizadora. Tremendo es un tío normal, como tú y como yo, pensé después de entrevistarle. Trabajaba este humilde juntaletras en Ya.com, el portal de internet, colaboraba con el sello Zona Bruta y hurgaba en todos los fregados interesantes. «Vidalogía» – lo cuentan ellos en el documental- marcó en estos artesanos la ilusión por un futuro pleno de groove y el nacimiento de esa comunidad anárquica y talentosa que fue Chacho Brodas, todo un contenedor de sabores afines al funcarreo canalla y al hip hop más vanguardista. Claro que los incorporados no eran menos: Aqueel, Quiroga, Juan y Mbaka. Canela.
Treme y Griffi tienen mucho de relojeros, porque su destreza y dedicación han convertido todo lo que tocan en pura artesanía. Tremendo ha crecido profesionalmente al ritmo que eligió para vivir. Sencillo, brillante e incomparable con nadie. Si en su momento he disfrutado y aprendido de estos creadores cabales, viendo el documental me siento convencido de la necesidad extrema de su divulgación, especialmente para los inquietos que ahora hacen música urbana. Para aprender la lección de dos genios que nunca se creyeron nada más que amantes de sus sueños. Y un favor, divulgad el documental sin parar. Ellos se han tomado todo el tiempo, mucho tiempo, para conseguirlo.
César Cid